Entre sus muchas afirmaciones, Patricia nos dijo que la actriz pasaba todo el día drogada: "Que te fumes un 'chubby', como ella le decía, no tiene nada de malo, pero cuando empiezas en la mañana y fumas de 5 a 7 'carrujos' al día… Era torpe, se tropezaba, no hablaba bien y yo me comencé a asustar", dijo la escritora.
Y agregó: "Silvio, su asistente, me dijo que ella fuma desde que tenía 16 años. Y sí le creo porque él era quien le daba la mota. La controlaba dándole el chuby (como Lucía le llamaba a la droga). Todo su núcleo se desbarató gracias a esto, y a mí me causó un conflicto con su asistente. Me asombraba cómo él le llevaba la droga, y ella la guardaba en su buró... Una vez me dijo: ‘es la yerbita que Dios nos puso en el camino y no tiene nada de malo fumarla’”.
Pero la cosa no para ahí. También habló del miedo que le tiene a Lucía y los amores imaginarios de la intérprete de 'Amor de nadie': "Es una mujer solitaria. A veces dice que tiene un novio francés, luego un italiano, aunque en realidad duerme sola”.
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