Era de esperar que algo de esto pudiera ocurrir. WikiLeaks acaba de anunciar en un breve comunicado a través de Facebook que se le ha aplicado la denominada Patriot Act a través de su proveedor de alojamiento DNS situado en California.
Una orden de búsqueda y recopilación de todo el material disponible de Julian Assange y la organización que será enviado a Washington. El motivo, probablemente, el flujo de cables que han comenzado a publicarse desde esta mañana en Twitter. Assange y WikiLeaks están a un paso de ser etiquetados como organización terrorista.
Como decía al principio, el origen de esta situación alertada hace escasos minutos tuvo lugar hace unas horas. WikiLeaks anunció que comenzaría a lanzar cientos de cables con la ayuda de Twitter. Cables que a lo largo del día han mostrado las relaciones entre Estados Unidos con Libia y China, entre el resto de 35.000 cables que se espera filtrar. Este hecho ha sido muy probablemente el detonador de la conocida como Patriot Act, una ley que puso en marcha el gobierno de Bush el 26 de octubre de 2001 tras los ataques terroristas del 11S, una ley que por otra parte sitúan a WikiLeaks y su fundador a un paso de ser oficialmente buscados y sitiados como enemigos terroristas de los Estados Unidos.
Así lo anunciaban desde WikiLeaks:
Nuestro proveedor de alojamiento DNS de California, Dynadot, ha recibido una Ley Patriota para la recolección de información sobre Julian Assange y la organización. Se ha cumplido. La orden busca toda la información disponible sobre Assange y WikiLeaks, para el jurado EE.UU. en Alexandria, Washington
Lo primero que se podría pensar es que no existe coincidencia ni en el momento ni en el lugar en el que los Estados Unidos aplican la controvertida ley. Esta ley no necesita en la jurisdicción norteamericana de avisos, se trata de una ley en el que cualquier compañía que opere en territorio estadounidense debe aceptar y acatar aquella información que se le pida. No sólo eso, la ley puede obligar a que el informante (empresa o compañía) no revele esta información a nadie más que a ellos mismos. Es precisamente por esta razón, por el hecho de que hagan público la aplicación de la Patriot Act, que Estados Unidos parece haber comenzado una lucha directa contra WikiLeaks sin posible retorno.
A la situación precaria que se encontraba la organización tras la destrucción de parte de la información que aún no se había publicado, ahora llega esta aplicación que anuncia juicios y ataques hasta que WikiLeaks desaparezca.
Por otro lado, Julian Assange podría verse en serios apuros tras la noticia. El fundador de la organización lleva seis meses bajo arresto domiciliario en Londres mientras lucha contra una posible extradición a Suecia. Extradición que muchos piensan como previo paso a los Estados Unidos. No sería descabellado pensar que con la Patriot Act en la mano, Assange esté a un paso de llegar al país.
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