años), gritaba y lloraba mientras el médico Conrad Murray recogía restos de fármacos.
Álvarez, el primer testigo en declarar en la tercera jornada del juicio por la muerte de 'El Rey del Pop', fue una de las primeras personas que llegó al dormitorio del creador de 'Thriller', cuando el doctor Conrad Murray acusado de homicidio involuntario en este caso, alertó de que su paciente había tenido "una mala reacción".
El testigo explicó que vio a Jackson tumbado boca arriba sobre una cama, con la cabeza mirando hacia la puerta, los ojos y la boca abierta. Aseguró que Murray hizo compresiones sobre el pecho del cantante y le pidió que buscara ayuda: "Alberto, deprisa, tenemos que conseguir una ambulancia y llevarlo a un hospital", dijo Álvarez, repitiendo las palabras del médico en aquellos momentos.
Relató que en ese instante Paris, la hija de Michael entró en el cuarto con su hermano Prince (de 14 años) y gritó "¡Papi!" entre lágrimas. El empleado le pidió a Conrad: "No los dejes ver a su padre así", a lo que este respondió sacando a los chicos de la habitación diciéndoles que no se preocuparan, que todo iba a salir bien.
Álvarez se encargó de llamara los servicios de emergencia y acto seguido, según el testigo, el médico agarró un puñado de frascos que estaban en una mesilla de noche junto a la cama y le ordenó: "Pon esto en una bolsa", afirmó Álvarez.
El testigo declaró que Murray metió los recipientes en la bolsa y deespués le pidió que quitara una bolsa que colgaba de un gotero y la pusiera en otra bolsa. El director de logística siguió las instrucciones, pensando que respondían a una "emergencia" y tenían "las mejores intenciones".
LA CAMA, MUY CLASICA, EN QUE MURIO MICHAEL JACKSON
Alberto observó que dentro de la bolsa del gotero había un líquido blanco, lo que encaja con la sustancia que el artista solía usar para dormir y ala que llamaba 'su leche'. Además, describió que había un frasco, mismo que ya fue identificado en la Corte hoy como un bote de propofol, anestésico que la autopsia determinó como causa de muerte del artista.
El director de logística relató que Michael no tenía ningún dispositivo intravenoso conectado a su cuerpo, aunque sí unos tubos en sus fosas nasales, una botella de oxígeno y un catéter urinario introducido en el pene.
Otro de talle que surgió en la audiencia de ayer miércoles, fue que Michael Amir Williams, asistente personal de Jackson, comentó que ya en el hospital, el médico le pidió que lo llevara de regreso a la mansión del cantante para evitar que alguien encontrara "una crema" que "Michael no habría querido que el mundo supiera de ella".
La acusación sostiene que Conrad Murray actuó con "flagrante negligencia" en el cuidado de 'El Rey del Pop' y eso llevó a la muerte del artista por sobredosis, evidencias que la Fiscalía entiende que el doctor trató de ocultar antes de que llegaran los servicios de emergencia.
La defensa de Murray alega que fue el propio Jackson, a quien señalan de adicto a los fármacos, quien en un descuido del médico se aplicó la dosis letal de propofol que lo mató, mientras Conrad Murray se declaró no culpable de los cargos y afrontaría una pena de hasta 4 años de cárcel si recibe una sentencia condenatoria y está previsto que el juicio se prolongue alrededor de cinco semanas.
0 comentarios:
Publicar un comentario