Es habitual la creencia de muchas personas: "cuanto más sudo, más adelgazo". Transpirar más no significa obtener mejores resultados, o bajar esas libras de más; de hecho, seguramente tengas menores resultados en relación a una persona bien hidratada.
Al perder agua tu cuerpo, tu corazón tendrá que latir más rápido para llevar los nutrientes y oxígeno necesarios hacia tus músculos, al elevar tu frecuencia cardíaca, se elevará también tu presión arterial, sumado al aumento de la temperatura. El riesgo que corres es muy alto.
Si tu objetivo es perder peso, lo recomendable será vestir ropa ligera, porque te impedirá tener una adecuada transpiración.
Al incrementar la temperatura, tu cuerpo dejará de quemar grasas, ya que tu metabolismo se defenderá tomando glucógeno, por ser la fuente de energía más cercana.
Un cuerpo con menor temperatura durante el ejercicio quema grasas, así que puedes sudar, pero hazlo de manera natural y con la ropa adecuada.
Ten en cuenta que la elevación de la temperatura a un cierto grado inhibe a los neurorreceptores que controlan la sensación de sed. Es por ello que en ejercicios intensos deberás beber pequeñas cantidades de agua durante la actividad (varias veces) aunque no sientas sed.
Tener sed durante el ejercicio es síntoma de deshidratación, si continúas el ejercicio y no ingieres agua, sobrevendrán los mareos, calambres, pérdida de concentración y posibles desmayos. Por eso en las clases de spinning o ejercicios intensos se debe beber agua. La misma deberá estar fría y ser ingerida en pequeños sorbos.
Qué recursos no utilizar. Los elementos plásticos u otros recursos para aumentar la sudoración, no sólo no ayudan a adelgazar, sino que dificultan la eliminación de toxinas mediante la transpiración normal.
Es también desaconsejable realizar actividad física en situaciones de alta temperatura y con exceso de ropa de abrigo, ya que se favorecerá una posible deshidratación.
La deshidratación provoca, entre otras cosas, una disminución grave de regulación de la temperatura corporal. Algunos signos de deshidratación son: descenso del rendimiento físico, sequedad en la boca, dolores de cabeza y desconcentración.
¿Qué hacer entonces?
Lo que ayuda a eliminar grasas es la práctica de actividades aeróbicas: ejercicios de baja intensidad como caminar, jugar golf, nadar, realizar gimnasia acuática o trotar a velocidad lenta durante un tiempo prolongado. Eso sí, sin aumentar la ingesta calórica. Si ingieres mayor cantidad de calorías con la dieta diaria (proporcionada por la cantidad o calidad de los alimentos) excusándote en el hecho de realizar actividad física, es muy probable que no adelgaces, sino que mantengas tu peso. Depende del exceso, posiblemente también puedas aumentarlo.
Más beneficios
Más beneficiosEl realizar actividad física aeróbica te aportará múltiples beneficios:
• Te sentirá con más energía,
• Mejorará tu circulación sanguínea.
• Contribuirá a bajar los niveles de colesterol en la sangre, reduciendo el riesgo de ataque cardíaco.
• Aumentará tu capacidad respiratoria y disminuirá la fatiga.
• Tus músculos se tonificarán.
• Podrás bajar de peso y reducir la grasa corporal.
0 comentarios:
Publicar un comentario