damnificados, informó la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM).
Los recursos serán distribuidos por medio de las diócesis de las zonas afectadas, señaló la CEM en un comunicado.
Además de esa ayuda, canalizada a través del Pontificio Consejo "Cor Unum", el pontífice dirigió un mensaje de consuelo y solidaridad a México, según los obispos.
"Hondamente preocupado por las dramáticas consecuencias del paso de los fenómenos", el obispo de Roma se suma así a los esfuerzos de la Iglesia Católica en México, que, "como lo ha hecho siempre en situaciones semejantes, desde el comienzo de la desgracia, ha estado cerca de quienes han perdido a sus seres queridos y se han quedado sin hogar y sin patrimonio", señaló el comunicado.
La CEM indicó que "los obispos de la República Mexicana, sacerdotes, diáconos, personas consagradas, seminaristas, fieles laicos y hombres y mujeres de buena voluntad han respondido pronta, generosa y organizadamente ante la emergencia" derivada del paso de los ciclones tropicales.
Ingrid y Manuel, que alcanzaron la categoría de huracán, azotaron desde hace dos semanas el territorio mexicano, el primero desde el océano Atlántico y el segundo desde el Pacífico.
De acuerdo con las cifras oficiales más recientes, el embate simultáneo de los ciclones dejó al menos 147 muertos, 53 desaparecidos y cientos de miles de damnificados en México, donde 309 municipios han sido declarados en desastre natural en 18 de los 32 estados del país.
El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, canceló su asistencia a la Asamblea General de la ONU en Nueva York y acortó una visita que tiene previsto hacer esta semana a Asia, a fin de atender la emergencia en su país.
Peña Nieto indicó que ya no realizará la visita que tenía programada a Singapur, entre el 4 y el 5 de octubre, y que su gira asiática se ajustará para asistir únicamente a Indonesia, en donde participará en el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC).
Fuente: Infobae.com
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