reinstalar los equipos incautados entonces, cumpliendo una sentencia emitida en julio pasado por la Cámara Civil y Comercial del juzgado de Primera Instancia de aquí.
Sin embargo, la disposición legal no pudo cristalizarse la mañana de este día, porque no pudieron poner a funcionar el transmisor, que presentó desperfectos, aparentemente por falta de uso.
Con la entrega e instalación de los aparatos decomisados INDOTEL dio cumplimiento a la disposición del mismo tribunal, pero decidida el 17 de julio de este año, que estableció que la devolución debía realizarse a las 11:00 de la mañana de este jueves, como ocurrió.
Se recuerda que el 25 de marzo del 2010 y bajo el alegato de que Cibao TV Club operaba de manera ilegal, ese organismo gubernamental procedió a la incautación provisional de los equipos y las instalaciones donde operaban, localizados en la calle Doctor Llenas, en los Cerros de Gurabo, de esta ciudad.
En el proceso de restauración de los aparatos INDOTEL está representado por las abogadas Abril Solano y Carmen Jáquez, así como por el técnico Luis Batista, mientras Cibao TV Club, propiedad del empresario Víctor Tejada, es asistida por los juristas Ramón Lora y Nelson Cerda, asistidos de los técnicos Bryan Flete y Juan Tomás Estrella.
Tras casi una hora de intentar poner en funcionamiento el transmisor, las partes llegaron al acuerdo de que los especialistas de INDOTEL se encargarían de repararlo, y con ese propósito se marcharon del lugar, para regresar con él listo para funcionar.
El acto de alguacil que recibieron el presidente de esa compañía de televisión y sus abogados el pasado miércoles, aclara que debían recibir los equipos pero que deben abstenerse a prestar con ellos el servicio público de televisión por ondas terrestres o abierta “por carecer de título habilitante o licencia expedida por el Estado para ello, hasta que el Tribunal Constitucional estatuya sobre las instancias pendientes de fallo”.
Sin embargo, El empresario Tejada y sus representantes legales reclama que se le dé cumplimiento a una sentencia emitida por el mismo tribunal, el 10 de mayo del 2010, que entonces decidió la inmediata entrega sin demora de los equipos incautados “e inmediata reapertura de dicha planta televisiva, en las mismas condiciones que se encontraba al momento de la incursión de las autoridades del INDOTEL en su recinto”. Esa decisión precia una condena al INDOTEL a que pague un astreinte diario de 5 mil pesos por cada día que transcurra sin dar cumplimiento a todo lo ordenado en dicha ordenanza.
Empero, el 14 de mayo del 2010 INDOTEL demandó por ante la Suprema Corte de Justicia la suspensión de la ejecución de dicha condena, lo que fue aceptado por esa instancia judicial, hasta tanto el Tribunal Constitucional, apoderado por resolución de la Suprema Corte de Justicia, decida el asunto.
Fuente: El Nacional
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