Las paradas de autobuses, los supermercados y tiendas registraron
ayer un gran movimiento en los aprestos para la celebración de la
Nochebuena. Durante las primeras horas de ayer, las principales calles y
avenidas
del Gran Santo Domingo, próximas a los centros comerciales y mercados, lucían congestionadas por un gran flujo de personas que aprovecharon para comprar los ingredientes de la cena de esta noche. Las góndolas de los vegetales, frutas, bebidas y carnes asadas, en varios supermercados como el Multicentro La Sirena, Plaza Lama, La Cadena, Bravo, Jumbo y Nacional lucían llenas, al igual que el área de caja y regalos.
Pese a no tener intención de celebrar la tradicional cena navideña, la señora María Mancebo era una de las que arrastraban un carrito lleno de manzanas, uvas y pollos asados, entre otros productos.
“Este año no voy a hacer ninguna cena porque estoy de luto, todas estas cosas son para regalárselas a familias más necesitadas para que tengan una Nochebuena feliz”, afirmó.
Si los supermercados lucían llenos, también el mercado Modelo, en la avenida Mella, entre otros, y en la franja de la avenida Duarte con París donde se expenden vegetales, frutas y hortalizas para ensaladas, se notaba un gran dinamismo. Con su listado en mano, Sheila Richardson y su esposo procedentes del sector de Villa Duarte, prefirieron comprar en el mercado modelo y así ahorrarse unos pesos. “Aquí las cosas son más económicas y es más fácil para llegar. El menú será el que hacemos todos los años: moro de guandules con coco, cerdo y pollo asado, ensalada verde y rusa y unos espagueticos”, manifestó.
Vendedores de este centro de abastos afirmaron que aunque en los últimos días las ventas han registrado un ligero incremento, todavía se mantienen lentas en comparación con años anteriores.
“La cosa está floja todavía, quizás mañana se active un poco más”, afirmó José Rosario.
Los precios de este año
Al preguntar al azar por algunos productos tradicionales que forman parte del menú que se sirve esta noche en gran parte de los hogares dominicanos se comprobó que la libra de tomates de ensalada se cotiza entre los 60 y 70 pesos, en tanto que la lechuga repollada cuesta RD$50; mientras que la zanahoria cuesta RD$25, al igual que las papas.
En cuanto a la jarra de guandules de aproximadamente una libra , su valor es de RD$50; el cartón de huevos cuesta RD$125 y el paquete de hojas de plátano para envolver cinco pasteles en hoja ayer se vendía a RD$20.
Con respecto a la carne de cerdo asado, la libra se cotiza entre los RD$200 y RD$210 en los puestos ambulantes de la autopista de San Isidro y del kilómetro 10 y medio de la autopista Duarte. Mientras que los pollos asados se venden entre RD$250 a RD$300 la unidad.
En el caso de las frutas, las manzanas se venden, dependiendo del tamaño, entre 10 y 40 pesos, las uvas entre RD$100 y RD$110 la libra y los dulces navideños entre RD$50 y RD$100.
La avenida Duarte abarrotada
Como todos los años la avenida Duarte, cuna del comercio popular, lucía abarrotada de personas que se disponían a comprar ropa, zapatos y enseres del hogar.
Las brigadas de limpieza del Ayuntamiento del Distrito Nacional no daban abasto para retirar los grandes cúmulos de desperdicios frente a las tiendas.
Aunque la mayoría de las personas entrevistadas coincidieron en que este año se “ajustarán un poco los cinturones”, muchos se resisten a dejar de estrenar una “pinta” (ropa nueva) para bailar y darse sus tragos hoy y mañana.
“Imagínese, estos días son para gozar, uno se pasa el año entero trabajando y aunque uno sea pobre tiene que darse un gusto aunque sea”, sostuvo Francisco Ramírez.
Dueños de importadoras de ropa en el sector de Villa Consuelo, como Mirla Féliz, se quejaron de las bajas ventas atribuidas a la incursión de comerciantes chinos en el mercado. “Nada que ver con otros años y más ahora que los chinos que no pagan impuestos pueden vender más barato que nosotros”, afirma.
La venta de ropa de pacas debajo del elevado de la 27 de Febrero también se notó activa, al igual que las áreas de juguetería de las tiendas.
Éxodo al interior
Desde temprano, en el Kilómetro 9 de la autopista Duarte, el flujo de pasajeros con destino a los pueblos del Cibao aumentó y las paradas de autobuses lucían llenas de viajeros cargados de bultos y alegría para el reencuentro con sus familiares y allegados. Es el caso de Leocadia Marte, quien pasará estas fechas en Nagua con sus cuatro hijos y una cuñada.
“Esperamos gozar mucho y que todo pase tranquilo y que no hayan muchos muertos este año”.
Ya en la avenida Duarte, donde se ubican las paradas con destino a los pueblos del Sur y el Este, el movimiento era mayor.
Las guaguas para viajar a Bánica (Azua), Vallejuelo y El Cercado (San Juan de la Maguana) estaban llenas, aunque los choferes afirmaron que el flujo es menor con respecto al año pasado.
“Mucha gente prefiere mandarle los chelitos a su familia porque gastan más viajando”, dijo Luis Familia.
Los precios de los pasajes se mantenían estables entre los RD$350 a RD$400.
Mientras tanto, empleados de la parada de Caribe Tours en la avenida 27 de Febrero dijeron que este año el éxodo de viajeros se mantiene muy parecido al de años anteriores, caracterizado por largas filas entre hoy y mañana.l
Origen de la celebración
La cena de Nochebuena es uno de los rituales más especiales del año donde la familia se reúne alrededor de la mesa para celebrar el nacimiento del Niño Jesús. Según el portal Catholic.Net esta costumbre nació en Europa y simboliza la abundancia que Cristo nos trae con su llegada.
Su origen también se remonta al ayuno al que los fieles católicos debían someterse durante la vigilia de Navidad, ayuno que permitía tomar una cena abundante tras la Misa del Gallo. En muchas familias previo a la cena tienen por costumbre reunirse junto al Nacimiento para realizar la ceremonia de arrullar y acostar al Niño Dios. Los platos que se sirven varían según la cultura de cada país. Mientras en España es tradición servir cordero, mariscos y turrones, en Latinoamérica abunda el pavo, arroces y lechón asado.
Opiniones
María Mancebo
Ama de casa
Aunque su ánimo no está para fiestas y celebraciones, María Mancebo compró los ingredientes de una cena para regalarlos a una familia pobre. “Este año no voy a hacer ninguna cena porque estoy de luto, todas estas cosas son para regalárselas a familias más necesitadas para que tengan una Nochebuena feliz”.
Sheyla Richardson
Ama de Casa
Con listado en mano, Sheyla y su esposo compraron, en el mercado Modelo, los ingredientes para la cena de esta noche. “Aquí las cosas son más económicas. El menú será el que hacemos todos los años: moro de guandules con coco, cerdo y pollo asado, ensalada verde y rusa y unos espagueticos”.
Leocadia Marte
Viajera
La joven madre era de las que ayer hacían largas filas junto a sus cuatro hijos y una cuñada en la parada del 9 para viajar al municipio de Nagua a pasar las fiestas con sus familiares. “Esperamos gozar mucho y que todo pase tranquilo y que no hayan muchos muertos este año”.
Raymer Soto
Frutero
Este vendedor de frutas navideñas afirma que las ventas se han ido incrementando en los últimos días aunque no igual en comparación con años anteriores. “La cosa se está moviendo al paso porque la gente tiene miedo de gastar los chelitos porque el mes de enero viene duro con el paquetazo”.
del Gran Santo Domingo, próximas a los centros comerciales y mercados, lucían congestionadas por un gran flujo de personas que aprovecharon para comprar los ingredientes de la cena de esta noche. Las góndolas de los vegetales, frutas, bebidas y carnes asadas, en varios supermercados como el Multicentro La Sirena, Plaza Lama, La Cadena, Bravo, Jumbo y Nacional lucían llenas, al igual que el área de caja y regalos.
Pese a no tener intención de celebrar la tradicional cena navideña, la señora María Mancebo era una de las que arrastraban un carrito lleno de manzanas, uvas y pollos asados, entre otros productos.
“Este año no voy a hacer ninguna cena porque estoy de luto, todas estas cosas son para regalárselas a familias más necesitadas para que tengan una Nochebuena feliz”, afirmó.
Si los supermercados lucían llenos, también el mercado Modelo, en la avenida Mella, entre otros, y en la franja de la avenida Duarte con París donde se expenden vegetales, frutas y hortalizas para ensaladas, se notaba un gran dinamismo. Con su listado en mano, Sheila Richardson y su esposo procedentes del sector de Villa Duarte, prefirieron comprar en el mercado modelo y así ahorrarse unos pesos. “Aquí las cosas son más económicas y es más fácil para llegar. El menú será el que hacemos todos los años: moro de guandules con coco, cerdo y pollo asado, ensalada verde y rusa y unos espagueticos”, manifestó.
Vendedores de este centro de abastos afirmaron que aunque en los últimos días las ventas han registrado un ligero incremento, todavía se mantienen lentas en comparación con años anteriores.
“La cosa está floja todavía, quizás mañana se active un poco más”, afirmó José Rosario.
Los precios de este año
Al preguntar al azar por algunos productos tradicionales que forman parte del menú que se sirve esta noche en gran parte de los hogares dominicanos se comprobó que la libra de tomates de ensalada se cotiza entre los 60 y 70 pesos, en tanto que la lechuga repollada cuesta RD$50; mientras que la zanahoria cuesta RD$25, al igual que las papas.
En cuanto a la jarra de guandules de aproximadamente una libra , su valor es de RD$50; el cartón de huevos cuesta RD$125 y el paquete de hojas de plátano para envolver cinco pasteles en hoja ayer se vendía a RD$20.
Con respecto a la carne de cerdo asado, la libra se cotiza entre los RD$200 y RD$210 en los puestos ambulantes de la autopista de San Isidro y del kilómetro 10 y medio de la autopista Duarte. Mientras que los pollos asados se venden entre RD$250 a RD$300 la unidad.
En el caso de las frutas, las manzanas se venden, dependiendo del tamaño, entre 10 y 40 pesos, las uvas entre RD$100 y RD$110 la libra y los dulces navideños entre RD$50 y RD$100.
La avenida Duarte abarrotada
Como todos los años la avenida Duarte, cuna del comercio popular, lucía abarrotada de personas que se disponían a comprar ropa, zapatos y enseres del hogar.
Las brigadas de limpieza del Ayuntamiento del Distrito Nacional no daban abasto para retirar los grandes cúmulos de desperdicios frente a las tiendas.
Aunque la mayoría de las personas entrevistadas coincidieron en que este año se “ajustarán un poco los cinturones”, muchos se resisten a dejar de estrenar una “pinta” (ropa nueva) para bailar y darse sus tragos hoy y mañana.
“Imagínese, estos días son para gozar, uno se pasa el año entero trabajando y aunque uno sea pobre tiene que darse un gusto aunque sea”, sostuvo Francisco Ramírez.
Dueños de importadoras de ropa en el sector de Villa Consuelo, como Mirla Féliz, se quejaron de las bajas ventas atribuidas a la incursión de comerciantes chinos en el mercado. “Nada que ver con otros años y más ahora que los chinos que no pagan impuestos pueden vender más barato que nosotros”, afirma.
La venta de ropa de pacas debajo del elevado de la 27 de Febrero también se notó activa, al igual que las áreas de juguetería de las tiendas.
Éxodo al interior
Desde temprano, en el Kilómetro 9 de la autopista Duarte, el flujo de pasajeros con destino a los pueblos del Cibao aumentó y las paradas de autobuses lucían llenas de viajeros cargados de bultos y alegría para el reencuentro con sus familiares y allegados. Es el caso de Leocadia Marte, quien pasará estas fechas en Nagua con sus cuatro hijos y una cuñada.
“Esperamos gozar mucho y que todo pase tranquilo y que no hayan muchos muertos este año”.
Ya en la avenida Duarte, donde se ubican las paradas con destino a los pueblos del Sur y el Este, el movimiento era mayor.
Las guaguas para viajar a Bánica (Azua), Vallejuelo y El Cercado (San Juan de la Maguana) estaban llenas, aunque los choferes afirmaron que el flujo es menor con respecto al año pasado.
“Mucha gente prefiere mandarle los chelitos a su familia porque gastan más viajando”, dijo Luis Familia.
Los precios de los pasajes se mantenían estables entre los RD$350 a RD$400.
Mientras tanto, empleados de la parada de Caribe Tours en la avenida 27 de Febrero dijeron que este año el éxodo de viajeros se mantiene muy parecido al de años anteriores, caracterizado por largas filas entre hoy y mañana.l
Origen de la celebración
La cena de Nochebuena es uno de los rituales más especiales del año donde la familia se reúne alrededor de la mesa para celebrar el nacimiento del Niño Jesús. Según el portal Catholic.Net esta costumbre nació en Europa y simboliza la abundancia que Cristo nos trae con su llegada.
Su origen también se remonta al ayuno al que los fieles católicos debían someterse durante la vigilia de Navidad, ayuno que permitía tomar una cena abundante tras la Misa del Gallo. En muchas familias previo a la cena tienen por costumbre reunirse junto al Nacimiento para realizar la ceremonia de arrullar y acostar al Niño Dios. Los platos que se sirven varían según la cultura de cada país. Mientras en España es tradición servir cordero, mariscos y turrones, en Latinoamérica abunda el pavo, arroces y lechón asado.
Opiniones
María Mancebo
Ama de casa
Aunque su ánimo no está para fiestas y celebraciones, María Mancebo compró los ingredientes de una cena para regalarlos a una familia pobre. “Este año no voy a hacer ninguna cena porque estoy de luto, todas estas cosas son para regalárselas a familias más necesitadas para que tengan una Nochebuena feliz”.
Sheyla Richardson
Ama de Casa
Con listado en mano, Sheyla y su esposo compraron, en el mercado Modelo, los ingredientes para la cena de esta noche. “Aquí las cosas son más económicas. El menú será el que hacemos todos los años: moro de guandules con coco, cerdo y pollo asado, ensalada verde y rusa y unos espagueticos”.
Leocadia Marte
Viajera
La joven madre era de las que ayer hacían largas filas junto a sus cuatro hijos y una cuñada en la parada del 9 para viajar al municipio de Nagua a pasar las fiestas con sus familiares. “Esperamos gozar mucho y que todo pase tranquilo y que no hayan muchos muertos este año”.
Raymer Soto
Frutero
Este vendedor de frutas navideñas afirma que las ventas se han ido incrementando en los últimos días aunque no igual en comparación con años anteriores. “La cosa se está moviendo al paso porque la gente tiene miedo de gastar los chelitos porque el mes de enero viene duro con el paquetazo”.
Fuente: El Caribe
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